No quiero dar envidia, pero en el norte hemos empezado el otoño con muy buen tiempo y seguimos terraceando como si fuese verano. En realidad en otoño hay días fantásticos en los que disfrutar de una comida al aire libre y por eso, y por si estáis en León o pensáis pasar por allí próximamente, hoy os enseño un nuevo restaurante con vistas panorámicas de la ciudad que os va a enamorar. Su encanto no está solo en las vistas, también en los platos y, además, si hace mal día no hay problema porque tiene una zona interior con una decoración también muy agradable.
El restaurante se llama niMÚ Azotea y está situado en el ático del hotel Conde Luna. Acaba de abrir al público y ofrece una espléndida panorámica sobre el casco viejo de León. Este nuevo restaurante y bar de tapas, es una sucursal del niMÚ Bistró de Madrid, que tal vez ya conocéis. En su carta ofrece cocina de mercado, moderna, creativa pero también algunos platos clásicos de la gastronomía nacional y especialmente de la leonesa. Su carta está pensada para que podamos pedir raciones para compartir y así probemos un poco de todo.
niMÚ Azotea es nuevo, pero obviamente cuenta con el apoyo de la experiencia de su hermano mayor de Madrid, que lleva abierto algo menos de un año, pero que ya se ha convertido en uno de los restaurantes de referencia en la milla de oro de la capital. El restaurante de León tratará de seguir el ejemplo del primero para hacerlo igual de bien.
El restaurante de León ha sido decorado por el diseñador Pascua Ortega y proyectado por el arquitecto Mariano Sáenz de Miera y estilo decorativo es tan vanguardista e innovador como su cocina. Yo he de reconocer que no lo he probado, pero he visto las fotos de muchos de los platos de la carta y ya se me hace la boca agua.
Si queréis saber qué incluye la carta, pues os cuento que en plan de picoteo hay para elegir patatas bravas, ensaladilla rusa con cigalitas salteadas, chips de patata con sardinilla y ali oli, burrata con vinagreta de tomate y orégano, ensalada de cigalas con brotes y crujiente de verduras, pizza-taco de alubias y carne, niguiris de huevo frito de codorniz con trufa, una tortilla de patata poco cuajada con cebolla caramelizada, tiras de pollo crujiente con salsa de mostaza y miel y perrito caliente XS.
Los precios por ración van desde los 8 euros de las bravas o la tortilla hasta los 16 euros de la burrata o los 18 euros de la ensalada de cigalas que, lógicamente, son los platos más caros.
Pero también hay opciones para los amantes de la cocina tradicional: merluza de pintxo con pimientos del Bierzo, chipirones de anzuelo en su tinta con arroz, rape pixin con pimientos verdes y cebolla caramelizada, mini burgers de solomillo, tacos de solomillo con patatas fritas y pimientos de padrón o el clásico steak tartar, más o menos en el mismo rango de precios.
Ah! Y nos faltaba lo mejor, los postres. Yo me pido el arroz con leche frito y helado de canela, pero también tenéis para elegir: brownie de la casa y bombones caseros. Y niMÚ Azotea completa su oferta gastronómica con una carta de vinos que incluye más de 50 referencias de los mejores caldos españoles.
Como os decía antes, la decoración del restaurante ha sido diseñada por Pascua Ortega que ha trasladado al local su personal estilo que combina elementos clásicos con los más vanguardistas. La imagen de marca, logos y branding han sido creados y desarrollados por María Vázquez y Oriol Rivero y la verdad es que les ha quedado todo precioso.
También me parece interesante destacar que niMÚ Azotea colabora con la Fundación Raíces a través de su proyecto Cocina Conciencia que tiene como objetivo la inserción socio-laboral de jóvenes en riesgo de exclusión social a través de la gastronomía. Como todos los restaurantes que colaboran con este proyecto, ofrece formación y un puesto de trabajo a algunos de estos jóvenes.
La comida tiene muy buena pinta, la terraza tiene unas vistas chulísimas, el interior está súper bien decorado y encima son solidarios... ¿qué más se puede pedir?
Más información | niMÚ Azotea
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