Mi abuela fue una gran lectora. Así, hasta sus últimos días siguió comprando nuevos títulos acomodándolos en esa biblioteca donde ya no cabía ni una hoja más.
De este modo, cada vez que por obligación debía leer a algún autor o por placer elegía conocer a otros, acudía a ella sabiendo que, de seguro, encontraríamos esos textos entre la innumerable cantidad que poseía. Claro que ella afirmaba tenerlos pero la tarea de encontrarlos no se nos hacía sencilla y, por tal motivo, prometí ayudarla a poner orden en su gigante biblioteca.
Pero ¡De cuanta ayuda nos hubiese sido este producto creado por Valerie Madill! Se trata de unas sencillas pero prácticas etiquetas que brindan la posibilidad de categorizar todos y cada uno de los libros. Colocadas a modo de fajas, en su frente podrán anotarse los datos, en tanto que existen de diferentes colores para hacer más fácil el hallazgo de determinado título.
Vía | Señorita Puri