Me temo que éste va a ser el producto más solicitado este verano en las farmacias españolas. De hecho ya está agotado en algunas zonas costeras del Mediterráneo.
Y es que, como cada verano, ya ha llegado la invasión de las temidas medusas a nuestras playas que aunque no sean las más peligrosas (la avispa australiana es capaz de matar a un hombre en minutos), el año pasado ocasionaron más de 70.000 casos de personas atendidas por su picadura.
Pero parece que al fin tenemos la solución y a partir de ahora vamos a poder bañarnos tranquilamente. Ya está a la venta el gel antimedusas de ISDIN y, lo que es mejor, parece que funciona.
Este producto está realizado a partir de un pláncton que hace que los tentáculos de la medusa resbalen sobre la piel, desprende unos inhibidores que confunden los sensores de las células urticantes de las medusas e impide que éstas disparen sus dardos ubricantes sobre nosotros.
Aunque se ha probado con éxito en todas las especies que normalmente visitan nuestro Mediterráneo, tal y como se indica en el envase no se ha encontrado voluntarios para comprobar si es eficaz con dos de las especies mortales que existen en el mundo: Physalia physalis y Chironex fleckeri. ¡No me extraña!
Aún así estoy seguro que el producto va a ser todo un éxito y a partir de ahora tan importante como el bañador y la toalla (o más) va a ser llevar nuestro bote de antimedusas cuando vayamos a la playa.
El precio de cualquiera de estos dos productos, que además son protectores solares, es de unos 15 euros. Habrá que probarlo, aunque nunca estaremos del todo seguros que funciona a no ser que nos pique una. Ojo, por si acaso.