Nos vamos de fiesta. Cada uno con su estilo y sin dejar de lado algún detallito excéntrico que pueda aportar un toque contracorriente y especial a vuestro look festivo por navidad.
Y es que ya lo dijo Stuart Mill en su ensayo sobre la libertad: El mayor peligro de nuestro tiempo se muestra bien en el escaso número de personas que se deciden a ser excéntricas.
Esmoquin de Bershka
Un esmoquin de Bershka es un blazier elegante y asequible. Con efecto bicolor y una pajarita de flores. Y si temes que tu primo lleve la misma pajarita, incluso el mismo blazier, te vuelvo a recomendar una pajarita de Bond&Burlington.
Una cartera de Il Bussetto
Una tarjeta de crédito, un documento identificativo y algo de dinero para el taxi. Y que no destroce con su volumen la línea de tu correcto pantalón. Una cartera de Il Bussetto. Artesanía, diseño, estilo y calidad Made in Italy.
Bufanda de cashmere
Las noches son frías y no es cuestión de salir enfundado en la bufanda del equipo de tus sueños, o pesadillas, Y puesto que llevarlas a veces es bastante engorroso, nos quedamos con una pieza ligera pero calentita, o sea de cashmere, y como esta no va a ser tu única fiesta y la vas a tener que volver a utilizar... un acabado sencillo pero de mucha calidad no te va a fallar.
La hora de Dalí
En nuestro look de fiesta no puede faltar un complemento imprescindible, un reloj para llamar la atención. Ni marca. Ni precio. Ni prestaciones inteligentes. No, nuestro hecho diferencial serán los bigotes de Dalí.
Kyle Broflovski
Al respecto del estilo findeaño le pregunté al directivo de una gran firma (de moda) en el bar de un tren. Me confesó que su modelo-referencia (ideal) no era otro que Kyle Broflovski: Ushanka verde, una chaqueta naranja con bolsillos al frente, pantalones y guantes verdes. Del estilo Kyle Broflovski me quedaría con casi todo, le dije. Pero la pieza que me parece imprescindible es la Ushanka (o gorro ruso) de color verde.