Los niños tienen que ver desde corta edad que no todo el monte es orégano, no señor. Para conseguir algo tendrán que sufrir, tendrán que sudar, incluso tendrán que trabajar. Pobres, no saben lo que les espera. Ellos sólo pedalean subidos en este plátano gigante sin la menor connotación sexual que la liamos.
A través de este mega tándem llamado Pedal Powered School Bus (olé para el pensador de un nombre tan conceptual) los niños irán cansados a clase después de pegarse una buena sudada arengados por el profesor de turno.
En Internet se dice que lo han diseñado en Holanda, De Caferacer, para dar más señas del responsable, pero yo creo que lo diseñó un profesor al que los niños no paraban de hacerle perrerías. Así cuando llegan a clase están pidiendo la hora y él puede comenzar a trabajar sin tener a nadie subido a la espalda. Este bus ecológico tiene hasta 10 plazas. En dos viajes una clase media está ventilada. Pena que lleguen las vacaciones para no probarlo.
Vía | Like Cool