Están locos estos humanos, los que tienen hijos les chillan porque garabatean las paredes de casa con sus lápices de colores, lo que no, se compran un perchero que deja la huella impresa cada vez que cuelgas un abrigo.
Es Slastic, un colgador de ropa diseñado por Ana Mir y Emili Padros en el que cada percha incorpora en su parte superior una pintura que se desplazará hacia abajo con el peso de la prenda colgada y por lo tanto irá plasmando su ¿obra de arte? en la pared.
Si piensas que esto no es más que una chaladura más de alguien que un buen día se desperto inspirado, te equivocas. Slastic está a la venta. De un metro de largo y cinco colgadores-pinturas, su precio es nada más y nada menos que 150 euros. Lo dicho, que hay que estar chalado.
Venga hijo, toma estas pinturitas y píntame un poco en la pared. Tú sí que tienes arte.
Vía | Noquedanblogs Más información | Made in design